Activado desde su nacimiento el YO busca Ser.
Se encuentra y se pierde a cada rato. En la juventud, una vez que se asumió
en sus condiciones básicas, los espacios entre perderse y encontrarse son
constantes, de intervalos cortos y profundamente imperativos. Soy lo que soy
y ya. Es el extremo de uno u otro sentimiento, de uno u otro descubrir...se,
relacionar..se, existir y buscarse.
En la adultez, esos espacios son más largos, menos
exigentes, menos imperiales, pero mucho más definidos y comprometidos. Son
espacios de vida que se llenan con causas, con realizaciones, con
resultados. Es el mismo mundo devenido al hoy sin cambiar el yo soy ni el yo
estoy -que siempre siguió siendo y estando- pero a la vez es otro Yo,
distinto, ni más ni menos que el otro, ni mejor ni peor que el otro que
creemos que ya pasó, que es pasado, pero que igualmente es parte del Yo
presente, adulto.
Con los años de activación el Yo crece y se realiza. No
es trabajo, es acción, es actividad, es infinitamente más que simple
trabajo. En cada acto, en cada verbo que expresa el poder del individuo, sin
importar sus resultados, este ser humano activo va tejiendo su trama
existencial, siendo cada vez más de lo que ES, individual y socialmente.
La economía es tan fundamental como pensamiento humano
que nos obliga en cada palabra y en cada concepto que hemos vertido a lo
largo de esta obra a comprometernos a superarla día a día y pensamiento tras
pensamiento: en comunidad, en complementación superlativa entre todos.
Del Yo, libre e independiente, éste a través de su
actividad busca y consigue en cada logro -bueno o malo, útil o inútil-
transformarse en César y dominar por sobre todo el Imperio de
su existencia física, intelectual y emocional.
Debe el pensamiento económico que presentamos aquí y que
proyectamos hacia el futuro darle a cada ser humano -a cada uno sin
excepciones- en cada actividad que desarrolle, la oportunidad sincera
y fresca para decirse y repetirse hasta el cansancio y la saturación
YO CÉSAR para así poder contemplarse Satisfecho y Absoluto
de su utilidad personal y social, descansando en la labor y en la
tarea REALIZADA para la Humanidad.