Muchos piensan que un cambio de estructuras y/o sistemas
debe necesariamente pasar por: frenar la vorágine y la inercia
descontrolada del desarrollo actual. Imposible.
Es imposible frenar la necesidad de desarrollo de cada
ser humano, es imposible frenar las estructuras que ya están construidas y
arraigadas y que motorizan a miles de millones de personas desactivándolas
así porque así.
El efecto de crear sistemas para desactivar esta inercia
sería como tratar de frenar en seco una estampida de búfalos. Los búfalos
van a cambiar el rumbo pero jamás van a pararse en seco. La discusión es
simplemente una discusión, ya que en términos efectivos lo único que es
factible hacer es reorientar los procesos humanos en los tiempos y espacios
en que el ser humano sienta y vea que puede cambiar.
No se puede frenar ni planificar el desarrollo libre. Sí
se puede realizar un punto y aparte cuando existen elementos completamente
planificados, es decir que el sistema funcione como una experiencia de
laboratorio en donde las variables son, en un todo o en una parte,
perfectamente controlables. Pero NO se puede hacer esto en la economía por
ser, por excelencia, una experiencia de campo -con variables
absolutamente abiertas- más cuando hoy la economía es mundial, y aún peor
con los condicionantes y maniqueos que el neoliberalismo y el financismo le
imponen a las sociedades, parar en seco el ímpetu de la actividad humana es
un imposible.
El sistema económico mundial, a pesar de sus
condicionamientos al sistema financista, tiene infinitos puntos de
realización libres e independientes que hacen que el Capitalismo de Trabajo
y Producción SÍ pueda sobrevivir y/o renacer a la actual ingerencia del
financismo, situación que nos pone en evidente experiencia de campo, que a
pesar de los controles y de los manejos financieros no pueden éstos abarcar
o influir el universo disperso y libre de las actuales y potentes
estructuras de producción y de creación humanas mundiales en cada rincón del
mundo ni en cada creador o productor humano que construyen la base agregada
de la economía mundial.
El ser humano apretado por normas, por injusticias, por
desfasajes contranatura busca su libertad, busca su comodidad y construye
alternativas que le vengan bien y que, aún extorsionado y apretado por la
norma impuesta coercitivamente, consigue liberarse y vivir a sus anchas.
Ejemplos se cuentan por cientos de miles: no pagar impuestos, no declarar
bienes, no respetar leyes obligatorias, en fin, hoy por hoy, una enorme
parte de la humanidad vive en un estado continuo de desobediencia civil,
de desobediencia cultural y de desobediencia económica para poder seguir
siendo lo que deben ser, lo que quieren ser: seres humanos en libertad y con
un desarrollo natural, cuando menos condicionado, mejor.
Aunque existan empresas y Estados que aún tratan de crear
estructuras y sistemas de contención del desarrollo con resultados diversos
en el corto plazo, lo único que se puede hacer es ir ordenando la tendencia
de los factores y de las variables libres.
Los elementos, los sistemas y la expresión que tenga la
característica de ser natural podemos desvirtuarlos pero, a corto o
largo plazo, vuelven a intentar reestablecerse en su antiguo equilibrio
natural, restableciendo la situación existente anterior a la manipulación
humana y política, salvo que se los aniquile, como sucede con frecuencia.
El retorno al equilibrio natural de todas las cosas es un
factor que hasta ahora solo la vanidad de la omnipotencia y omnisciencia de
algunos seres humanos ha dejado de lado, o no le ha permitido comprender y
evaluar en los momentos del desfasaje producido, sino que hemos tenido que
llegar al punto de necesidades catástrofe o de extinción de los elementos o
sistemas naturales para recién comprender el Daño producido por la
acción humana sobre los estados y acciones de la naturaleza.
La reorientación de factores o tendencias de desarrollo
se deben producir comprendiendo que los seres humanos podemos, con nuestro
poder de discernimiento, manejar los tiempos y los valores de impacto de
nuestros descubrimientos. Las variables y los elementos naturales que han
sido creados y con los cuales convivimos desde siempre deben ser
comprendidos y respetados completamente. El proceso evolutivo natural
no debe ser torcido por premisas maquinadas del ser humano, sino que
debe ser acompañado comprendiendo profundamente las preguntas que hacen a su
propia existencialidad compleja dentro de un universo aún mucho más complejo
e íntegro en el que co..habita.
Dos leyes fundamentales son:
Primera ley inmutable del universo: la ley
del cambio.
Segunda ley necesaria del universo: la ley
del equilibrio.
La primera es nuestra ley madre, la segunda nuestra ley
padre.
El ser humano debe descubrir la aplicación de ambas en
sus propios tiempos existenciales para sus realizaciones cotidianas y debe
redimensionar a diario los espacios que cada elemento de la naturaleza le
proporciona para que así se produzca el excedente -la riqueza real-
que la humanidad necesita para estar plenamente satisfecha.