Las teorías económicas se van ajustando a las necesidades
y experiencias de los pueblos. Nuevos valores, ecuaciones y potencialidades
nos proyectan hacia el Siglo XXI aportando soluciones conceptuales y
prácticas que dan sentido a nuevas formas socio-económicas.
Con cada aporte se acumula la experiencia de manera
revolutiva momento tras momento, año a año. Estas experiencias de todos
en actividad son para bien como para mal de la humanidad, pero son el origen
y las consecuencias que se acumulan en infinitos paisajes socio-económicos
de los cuales TODOS, indefectiblemente, participamos y somos creadores. A
esta experiencia planetaria humana económica ni una coma se le puede
sacar ya que somos lo que su sumatoria fue y es.
La problemática humana respecto a la mejor utilización y
distribución de los recursos físicos y humanos, a la mayor y mejor
satisfacción de las necesidades que todos tenemos, a la catástrofe económica
que muchos pueblos tienen aún persiste, y constantemente desde varios lados
es asumida y atacada para resolver.
El pensamiento económico debe evolucionar y
Re-Evolucionar para adaptarse al marco actual y a las necesidades
actuales y futuras humanas.
No son tan solo necesidades económicas o materiales sino
también de todo otro tipo. Somos seres humanos antes y después de cualquier
otra cosa, sea esta concreta, física, material o simplemente ideal, deseada,
emocional o espiritual.
Individuo, familia, sociedad inmediata y sociedad mundial
es el eje de expansión humana. Mi espacio, nuestro espacio y el espacio de
todos es también expansión humana y es incluyentemente compartido por todos.
Así las variables, diversidades y necesidades se multiplican de a millones
que son agregadas y enriquecidas por la cultura y la civilización de cada
grupo humano y en donde infinitos desarrollos afectan a todos de manera
directa o indirecta, antes o después de sus propios tiempos.
No podemos inventar nada nuevo, solo descubrir y
redescubrir, solo revolver en un momento y en un lugar y volver a
revolver lo mismo, pero en distinto momento y en otro lugar adaptándonos
a lo descubierto. Y así se da que siendo el tiempo y el lugar justos la
humanidad lo utiliza y obtiene sus beneficios.
La intención es volcar conceptos y visiones de ahora para
imprimir imágenes que espero sean útiles para expandir el orden social
actual, en especial en muchos espacios donde sabemos que es caótico,
indigente y alienado. Ideas que nos permitan refocalizar el orden económico,
institucional y político-social y que nos orienten hacia un norte que sea
más humano e integrado; ideas que nos hagan ver el peso real de los
desperdicios físicos y de la escasez de valores humanos en los marcos de la
actividad económica, que por la inercia y frenesí cotidianos estamos
despilfarrando y dejando de considerar y de ver como útiles e imprescindibles.
Conceptos que nos abran los ojos y las conciencias, para
comprender realmente el precio excesivo real y el peso futuro que implica el
derroche y la inconducta social que se produce, y además el enorme
sacrificio pasado y presente que en términos de trabajo y actividad humana
le requiere a la mayoría de las sociedades del mundo estos desajustes y
desfasajes de los sistemas actuales.
Despertarnos a los manejos subrepticios y silenciados de
abusos, de amansamiento, de alienación y aislamiento de sociedades completas
que han caído más allá de la pobreza y de la indigencia, más allá de la
esperanza y la posibilidad, y que viven en la impotencia estructural
individual y social para actuar como seres humanos sin poder identificarse
ni constituirse.
Hoy no alcanza con querer para poder cambiar, existen formas
estructurales muy enraizadas de corrupción y desfiguradas por el delito y la
injusticia que requieren mucho más que un ánimo de cambio, se necesita
conciencia de cambio, articulación social, organización cívica y fuerza de
pensamiento, de palabra y de acción física para transformar el actual estado
de cosas. Para producir estos profundos cambios nos comprometimos.